CLARO QUE HAY SOLUCIÓN, SÓLO QUE AÚN NO LA HAS ENCONTRADO

martes, 29 de noviembre de 2016

¿Adelgazar o comer sano?

He visto miles de dietas y me doy cuenta de que las más interesantes y efectivas son aquellas que se acercan con más acierto a un objetivo distinto de adelgazar que es el de comer sano. Suelen ser dietas muy similares a las recomendadas a los diabéticos con una drástica reducción de hidratos de carbono de rápida absorción, en especial azúcares y harinas blancas, se centran más en el pescado que en las carnes como fuente de proteína animal y tiene incluida una dosis de ácidos grasos omega 3. En todas las dietas que tienen como objeto comer sano dan mucho peso a las verduras y frutas, en especial a las primeras y apuestan por las segundas como única fuente de alimentos dulces.

Se trata de limitar los lácteos o apostar preferentemente por los fermentados y a ser posible de cabra u oveja. En las dietas para estar sano también tienen un papel relevante las legumbres y el consumo de agua frente a cualquier otra bebida. Te invitan a reducir la ingesta de café en favor de las infusiones. Además es muy importante eliminar de la dieta alimentos procesados en favor de alimentos caseros o naturales. Todos estos cambios, a la larga, producen efectos muy interesantes que ayudan a adelgazar, como por ejemplo la regulación del apetito o el equilibrio hormonal.

La conclusión final es que apostar por una dieta sana suele coincidir con conseguir adelgazar. Sin embargo, lo contrario, apostar por adelgazar sin tener en cuenta lo sano, suele provocar serios efectos sobre la salud como por ejemplo, las monodietas, la selección inadecuada de alimentos con serias repercusiones a largo plazo sobre el equilibrio hormonal, sobre los huesos o con el temido efecto rebote.

Algunas personas están convencidas de que comen sano y no adelgazan. Quizá deban preguntarse si realmente están apostando por comer sano. Es inevitable encontrar un cambio cuando se apuesta por comer sano.

miércoles, 16 de noviembre de 2016

¿Cómo tener voluntad para no comer?

Resulta bastante difícil resistirse a un placer y la voluntad no es la única herramienta que tenemos para conseguirlo. En este audio te ofrezco cuatro recursos que pueden ayudarte a resistirse frente al placer de comer alimentos insanos.


jueves, 10 de noviembre de 2016

Lecturas para adelgazar

Recientemente me iluminó una de esas bombillas que se encienden encima de la cabeza y que quería compartirlo contigo. Es la idea de escalar la montaña en vertical. Es de perogrullo ¿verdad? Pero esto que parece absurdo me ha llevado a un pensamiento revolucionario que ha cambiado mi forma de ver las cosas. 

Si eres una de esas personas que, como yo, se ha pasado media vida intentando hacer dietas que no les ha servido de nada porque no ha podido implementar, es porque has ido rodeando la montaña, es decir, has intentado adelgazar sin realizar cambios que suponen esfuerzos en tu vida. Un ejemplo de esto es hacer ejercicio. Quizá no te gusta el ejercicio y, por tanto, has buscado una solución que no implique hacer ejercicio. Pero ves que todo lo que intentas, fracasa. Si esto es así ¿no será ahora el momento de incluir el ejercicio en tu vida? Eso supondría hacer un cambio real, una escalada en vertical por esa montaña cuya cima tratas de alcanzar pero que no la alcanzas porque vas en horizontal. 

Para hacer cambios en tu vida, necesitas ideas nuevas y para incorporar ideas nuevas en tu vida, necesitas escuchar y leer a otras personas que hacen sus experimentos y que llegan a sus propias conclusiones. Por eso siempre te invito a que leas todo lo que encuentres sobre nutrición y deporte... pero eso sí, sé selectivo. Cuanto más selectivo seas, mejor. 

Por eso hoy voy a compartir contigo uno de los blogs más interesantes sobre nutrición y deporte con la que me he encontrado recientemente. No será la única recomendación que encuentres a partir de ahora. Todo lo que me parezca interesante lo compartiré contigo y este blog merece una visita. Te sorprenderá de las grandes ideas que contiene. Su autor ha recogido estudios relacionados con la nutrición, obesidad y salud y los ha llevado a un lenguaje más cercano para los que necesitamos hacer cambios reales en nuestros hábitos alimenticios. 


http://www.fitnessrevolucionario.com/

lunes, 7 de noviembre de 2016

Parar para seguir andando

Este fin de semana he estado en un evento y me he saltado todos mis preceptos. Pero cuando eso ocurre, la culpa no sirve para nada. La sensación de culpa genera cortisol que es una hormona que segrega las glándulas suprarrenales cuando se sufre mucho estrés y sus principales funciones son elevar el nivel de azúcar en sangre, suprime el sistema inmunitario y disminuye la formación ósea entre otras funciones.

El otro día escuché una frase que dice que a veces hay que pararse para seguir andando.. pues éstas son las ocasiones. Cuando tengas un evento, no los vivas con culpa, disfruta y come que ya lo corregiremos al día siguiente.

Una vez compartió conmigo un nutricionista el siguiente pensamiento:

¿Cuántos días al año tienes una fiesta o comilona? Pogamos 30 días o si me apuras, 60 días. Pero tienes los otros 305 días para trabajar en tu proyecto de adelgazar. Así que no hay que preocuparse por las fiestas sino por el resto de días. Para y disfruta y ya caminarás al día siguiente.

martes, 1 de noviembre de 2016

Adiós protocolos

Una de las cosas con las que estoy peleando en estos días son los protocolos. Te preguntarás a qué me refiero cuando hablo de protocolos. Si eres una persona que lucha a diario contra su obesidad identificarás los siguientes pensamientos:

Me he pasado comiendo... pero ahora toca el postre y el postre es sagrado. Luego tengo que merendar... aunque ahora mismo me reviente la barriga de todo lo que he comido y, por supuesto, nada de cenar un yogourt si me he pasado a medio día... tengo que cenar como Dios manda.

Esa es la frase que bendice nuestros protocolos: como Dios manda:

Un desayuno como Dios manda,
Una merienda como Dios manda,
Un postre como Dios manda
Los dos cafés del día, como Dios manda
la galleta o pastelito con el café como Dios manda...

Y luego están los protocolos de temporada: me refiero a las costumbres, es decir, la torrija de semana santa, el pestiño de pascua, el mantecado de navidad, el arrope de otoño...

Los protocolos tienen un inconveniente y es que no nos permiten ser flexibles. Las personas obesas tenemos muchas piedras en el camino: las fiestas, nuestra propia hambre, la alimentación de que disponemos, el dinero con el que contamos, los propios gustos...

y encima, los protocolos. 


¿Realmente necesitas comer postre? ¿tienes que cenar como Dios manda si te has pasado a medio día? ¿Tienes que tomarte tu café por religión? No creo que Dios mande tantas cosas. Es nuestro cerebro el que manda y nuestro cerebro no se cuestiona... sigue con sus viejas costumbres, esas costumbres que engordan.

Si aprendiéramos a identificar y cuestionar todos los protocolos, seríamos capaces de ser más flexibles y si hoy he ido a una boda y he comido mucho a medio día no tengo que cenar como Dios manda sino como el DÍA MANDA.

Así que voy a hacer un compromiso personal con vosotros y voy a eliminar uno de mis protocolos... me resulta tan difícil siquiera pensar en ello que tengo que pensarme muy bien cuál me voy a saltar para poder cumplir mi compromiso con eficacia. Permitidme que empiece con uno que a veces me salto pero que a partir de hoy voy a erradicar de mi vida y es el postre del almuerzo. A partir de hoy no voy a comer ningún tipo de postre. Cuando lo tenga vencido, es decir, cuando deje de maldecir el día que se me ocurrió haceros esta promesa, os lo comunicaré y me comprometeré con vosotros a erradicar otro hasta que no tenga ninguno. Si te apuntas a este reto, haz un comentario debajo de este artículo pero recuerda que es sagrado. Si lo haces es para llevarlo a cabo. Si no, no escribas nada.